miércoles, 6 de mayo de 2009

Si nuestra relación con alguien llega a un punto de equilibrio,  que sería lo más conveniente,  ¿ no intentar profundizar más en ella  o  arriesgarse  a correr el  riesgo de destruirla?

2 comentarios:

  1. ¿A qué nos referimos cuando hablamos de equilibrio?
    ¿Tal vez a encontrar ese punto estable que impide la caida?
    La comodidad, la tranquilidad, la seguridad... Están bien, son buenas cualidades... pero a ratos.
    Entre equilibrio y equilibrio mejor un toque de arrebato, una pizca de pasión y una chispa de delirio. Estos condimentos conseguirán matizar tanto equilibrio, tanta serenidad y tanta sosería.
    En el parque de atracciones las colas más largas las genera la Montaña Rusa no el Trenecito Chucuchú. Por algo será.

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  2. De acuerdo, deberíamos ser radicales -coger las cosas por la raíz- con las cosas que nos proporcionan emociones profundas, aunque solo fuese por unos pocos instantes.

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